El banquero central ha indicado que el BCE está siguiendo con lupa las negociaciones colectivas en los distintos países, ya que conforman uno de los elementos fundamentales de la evolución de la inflación subyacente. En la última cumbre de la autoridad monetaria, aún se detectaron presiones al alza elevadas sobre la inflación subyacente.
En cuanto a los tipos de interés, De Cos ha justificado la decisión del Consejo de Gobierno de subirlos en 25 puntos básicos en su última reunión monetaria, pero rebajando el ritmo de los incrementos, ya que las grandes alzas abordadas hasta ahora respondían a un punto de partida erróneo de unas condiciones financieras muy holgadas. Aunque el BCE seguirá subiendo los tipos de interés en su batalla por devolver la inflación al 2%, el gobernador del Banco de España ha anticipado que están más cerca del final.
Sin embargo, una parte importante de la decisión de cuándo se ha llegado al fin del ciclo de las subidas de tipos estará en cómo afecte al sector financiero la tormenta bancaria que desde marzo azota Estados Unidos y que ha provocado la intervención de tres entidades. Según ha señalado De Cos, las condiciones de financiación se han endurecido incluso más de lo que esperaban los bancos, y aunque no se anticipa un frenazo en seco del crédito por el pánico, aún persisten las dudas de si las entidades restringirán más la financiación de lo que el propio BCE la está apretando con sus subidas de tipos. Esto, si la inflación sigue evolucionando de forma favorable, podría anticipar el final de los incrementos del precio del dinero.