En declaraciones en una conferencia de prensa después de que el BCE mantuviera sin cambios sus tipos de interés y su programa de compras de activos, Draghi dijo que la caída del precio de las acciones bancarias -como sucedió tras la decisión de Reino Unido de salir de la Unión Europea- era un problema para las autoridades.
La baja fue particularmente pronunciada para las acciones de bancos con altos niveles de préstamos morosos, agregó.
Hablando una semana antes de la publicación de resultados de pruebas de estrés a los 51 bancos principales de la Unión Europea, Draghi dijo: "Los préstamos en incumplimiento de pago son ciertamente un problema significativo para la rentabilidad futura y para la capacidad que tienen los bancos de otorgar crédito".
Parte de las reformas en curso del sector bancario deberían incluir un mercado totalmente funcional para préstamos impagados, "posiblemente teniendo también un subsidio público en momentos de circunstancias excepcionales en que el mercado de préstamos impagados no esté funcionando bien", manifestó Draghi.