La semana pasada estuvo marcada por una serie de datos económicos, en su mayoría relacionados con la actividad industrial, que arrojaron dudas sobre la salud de la economía europea. Sin embargo, esta semana, todas las miradas están puestas en la respuesta que dará el Banco Central Europeo a las crecientes presiones inflacionistas y las señales de debilidad económica en la eurozona.
El BCE se enfrenta a un dilema, ya que debe equilibrar el control de la inflación con el estímulo al crecimiento económico. La inflación está aumentando, y algunos analistas se preguntan si el BCE elevará aún más las tasas de interés en su próxima reunión o si optará por una pausa en su ciclo de ajuste.
El miércoles, los inversores estarán pendientes del dato de inflación en Estados Unidos, que podría tener un impacto en la eurozona. A diferencia de meses anteriores, se espera que la inflación de agosto en Estados Unidos aumente al 3.6%, lo que podría cuestionar la idea de que las tasas de interés en EE. UU. han alcanzado su punto máximo. Aunque no se esperan cambios en las tasas en la próxima reunión de la Reserva Federal, algunos analistas no descartan ajustes adicionales antes de fin de año.
La presión sobre los mercados de renta fija es evidente, con los rendimientos de la deuda en aumento. Los crecientes precios de la energía y la anticipación de un aumento en la inflación en EE. UU. han llevado los rendimientos de los bonos del gobierno estadounidense a niveles cercanos al 4.30%. En Europa, los rendimientos de la deuda también están en alza, con los bonos alemanes cerca del 2.60% y los bonos españoles a diez años acercándose al 3.70%.
La Bolsa española ha comenzado la semana con los rendimientos de la deuda al alza, pero ha logrado ganancias gracias a la fortaleza del sector bancario. El Ibex ha superado los 9,400 puntos, y los inversores están tomando posiciones en el sector bancario, que se destaca en el índice con avances notables en Unicaja, Sabadell y BBVA.
Las utilities, por otro lado, enfrentan obstáculos debido al aumento de los costos de la deuda. Empresas como Red Eléctrica, Enagás y Naturgy se rezagan en el Ibex.
Inditex, la empresa más grande por capitalización bursátil de la Bolsa española, se prepara para la publicación de sus resultados. La compañía busca ampliar sus ganancias bursátiles hacia los 36 euros por acción.
En otras bolsas europeas, se espera que la volatilidad disminuya después de las recientes fluctuaciones. Sin embargo, las inversiones empresariales, particularmente las relacionadas con el petróleo, continúan siendo un impulsor importante. En el sector químico, las acciones de Covestro suben debido a las conversaciones con Abu Dhabi National Oil Company (Adnoc) sobre una posible adquisición.
El petróleo, después de tocar máximos desde enero, se mantiene en torno a los 90 dólares por barril, gracias a los estímulos de China y los recortes de suministro por parte de Arabia Saudita y Rusia.
El dólar, que ha estado en alza durante ocho semanas consecutivas, se ha estabilizado, lo que ha aliviado la presión sobre activos como el oro, que intenta recuperar los 1,950 dólares por onza, y el bitcoin, que busca rebotar por encima de los 26,000 dólares.
En resumen, los mercados globales enfrentan una semana llena de acontecimientos, con un enfoque especial en la inflación en Estados Unidos y la reunión del BCE. La volatilidad y la presión en los mercados de renta fija persisten, y los inversores están atentos a cualquier indicio de cómo los bancos centrales abordarán estos desafíos económicos.