Este gráfico lleva dos en uno, lleva la comparación de un valor como Repsol con otro valor como Iberdrola. Se puede ver qué ha ido ocurriendo a lo largo del año sobre todo, viendo como lo que algunos creían que era lo mejor, lo más seguro y lo más fuerte se convierte en algo que aunque siga siendo bueno no lo era tanto como parecía.
Sin embargo el otro valor que andaba más renqueante, todo ello a pesar de haber recuperado de manera más o menos importante se puede observar que tras los últimos movimientos, consiguiendo salir del último movimiento bajista de corto plazo ha conseguido continuar una vez más con su trayectoria de recuperación.
El año es largo y las idas y vueltas son continuas pero a pesar de todo se puede observar y ver que no todo es oro lo que reluce, es decir lo que parece estar muy bien no es lo que mejor tiene que estar pasado un tiempo y aquello que no está tan bien resulta que pasa a ser lo realmente bueno o en este caso sí que sería oro lo que no relucía.
Resumiendo este pequeño análisis o comentario, como se quiera ver, podemos afirmar a día de hoy que mientras lo que era bueno “teóricamente” Iberdrola a principio del año pasado, transcurrido un año habría tenido bajadas que rondaría el 10-15%. Mientras aquello que “teóricamente” parecía malo Repsol desde comienzos del año pasado al momento actual habría tenido subidas del 30-40%.
Ya ven de la importancia de elegir los valores en determinados momentos, dos inversores que hubiesen entrado a la vez a principios del año pasado en dos valores buenos y de primera fila, uno de ellos estaría en pérdidas (el que mejor estaba situado) y el otro estaría en beneficios (el que estaba peor).