A medida que nos acercamos a las reuniones del Banco Central Europeo y la Reserva Federal, que marcarán el rumbo de las próximas semanas, los inversores enfrentan un flujo constante de datos macroeconómicos que, en su mayoría, profundizan las preocupaciones sobre la economía global. En Asia, los últimos datos no ofrecen buenas perspectivas. El índice PMI de actividad del sector servicios en China ha caído a mínimos de ocho meses, agravando la situación del sector manufacturero del gigante asiático. En Japón, el gasto de los consumidores ha disminuido por quinto mes consecutivo, registrando una caída del 5% en julio, el doble de lo esperado.

La jornada comenzó con señales de debilidad económica en Asia, y continuó con una nueva decepción en Europa. El PMI compuesto de la eurozona, un indicador adelantado de referencia, fue revisado a la baja, pasando de 47 a 46.7 puntos, alejándose aún más de la marca de los 50 puntos que separa la contracción del crecimiento. En España, el sector servicios registró su primera contracción en casi un año.

La incertidumbre económica y bursátil que afecta a Asia y Europa también se refleja en Wall Street. La Bolsa de Nueva York retoma la actividad después de un largo fin de semana festivo debido al Día del Trabajo en Estados Unidos. Los futuros del Dow Jones, el S&P 500 y el Nasdaq apuntan a una apertura plana o ligeramente a la baja.

Esta cautela se extiende a Europa, impactando al Ibex, que en la jornada previa había borrado las ganancias iniciales. El índice español cerró con una caída del 0.35% y lucha por mantenerse por encima de los 9,400 puntos después de cuatro jornadas consecutivas de pérdidas.

Inditex emerge como un pilar sólido para el Ibex, acercándose a sus máximos históricos, respaldado por una valoración alcista de Bank of America. Las empresas del sector de servicios públicos, como Endesa, Iberdrola, Enagás y Naturgy, buscan contener las presiones bajistas.

Sin embargo, las compañías cíclicas enfrentan dificultades para mantenerse en verde en medio de las señales de debilidad económica. Los indicadores de China afectan a las cotizaciones de las acereras ArcelorMittal y Acerinox, mientras que el sector bancario se ve impactado por la rebaja de la recomendación de BBVA.

El resto de las bolsas europeas también están en territorio negativo, acercándose a los mínimos de una semana. Las firmas de inversión emiten recortes de recomendaciones que afectan a empresas europeas, especialmente en el sector bancario. Commerzbank cae un 5% en respuesta a una recomendación de "infraponderar" emitida por Barclays. La farmacéutica Roche y la minorista Tesco también retroceden debido a cambios en las recomendaciones.

Gráfico del Eurostoxx 50

Las empresas vinculadas al petróleo también experimentan dificultades a pesar del repunte en los precios del crudo, ya que las señales de debilidad macroeconómica contrarrestan el temor a recortes adicionales de suministro por parte de Arabia Saudita y Rusia.

En el mercado de deuda, las tasas de rendimiento se enfrían, con el bono estadounidense a 10 años por debajo del 4.20%. El dólar muestra fortaleza frente al euro, que cae por debajo de 1.08 dólares. El oro y el bitcoin también enfrentan dificultades debido a la firmeza del dólar, con el oro manteniéndose alrededor de los 1,960 dólares por onza y el bitcoin cayendo por debajo de los 26,000 dólares.

En resumen, los mercados globales continúan enfrentando desafíos económicos y volatilidad a medida que se observan señales de debilidad en Asia y Europa. Los inversores se mantienen en guardia mientras se acercan las reuniones clave de los bancos centrales y siguen atentos a los datos macroeconómicos que continúan generando incertidumbre en los mercados.