Finalmente, los fondos para recapitalizar la empresa serán de 1.170 millones de euros, además de avales por importe de 307 millones de euros, en línea con las estimaciones de entre 1.500 y 1.800 millones que se habían manejado inicialmente.
En un hecho relevante enviado en la madrugada del jueves, Abengoa señaló que parte de estos nuevos préstamos ya ha sido anticipado por sus bancos y bonistas en el último año, en medio de la fuerte crisis de liquidez que sufre el grupo de ingeniería y renovables desde hace meses.
Abengoa dijo que tras la reestructuración, los acreedores de Abengoa podrían llegar a tener alrededor del 90 por ciento del capital de la empresa, quedando al menos el 5 por ciento restante en manos de accionistas actuales como Inversión Corporativa, el holding que agrupa a las familias fundadoras de Abengoa. A este último porcentaje se podría sumar un 5 por ciento adicional si en un plazo de 8 años la compañía devuelve todas sus deudas. Abengoa dijo que ya tiene el compromiso de un grupo de inversores para aportar los fondos necesarios y que incluye a los siguientes fondos: Abrams Capital, Baupost Group, Canyon Capital Advisors, Centerbridge Partners, D.E. Shaw group, Elliott Management, Hayfin Capital Management, KKR Credit, Oaktree Capital Management y Värde.
La financiación del acuerdo tiene tres tramos: un crédito de 945 millones con vencimiento a casi 4 años, garantizado con activos en México y la participación en la joya de la corona del grupo, la filial estadounidense Abengoa Yield, que daría derecho a recibir un 30 por ciento del nuevo capital social.
Además, hay otro tramo de 194,5 millones garantizado con activos de ingeniería que da derecho a un 15 por ciento del capital, y un tercero de 30 millones para asegurar la financiación adicional necesaria para concluir el proyecto mexicano A3T. Este daría derecho a un 5 por ciento del capital.
Por su parte, quienes aporten los avales, que ya están asegurados por bancos, recibirían también un 5 por ciento.
Abengoa señala en el comunicado que el resto de los acreedores que se adhieran al plan podrán capitalizar el 70 por ciento de la deuda y refinanciar el resto en hasta seis años, a cambio de un 40 por ciento de la nueva Abengoa.
La alternativa sería asumir una quita del 97 por ciento y recibir el 3 por ciento de la deuda a los 10 años, sin intereses ni posibilidades de capitalización.
Tras el acuerdo se abre una fase en la que el resto de los acreedores - hasta alcanzar el 75 por ciento de una deuda declarada de alrededor de 9.500 millones- podrán mostrar su conformidad con el mismo antes de finales de octubre, cuando vence el plazo que el juzgado sevillano le dio a la empresa en abril para renegociar sus deudas.
Desde que se declaró en preconcurso a finales del pasado noviembre, la empresa sevillana se encuentra inmersa en un proceso de reconversión y venta masiva de activos para aligerar su estructura de costes y aliviar unas estrecheces de su caja que comprometen la nómina de sus empleados.