En el contexto del análisis de los bonos del mercado estadounidense, específicamente el bono a 30 años, se observa que la atención se centra en el T-Bond, un futuro que ha ganado notoriedad debido a la reciente caída en los precios y el consecuente aumento en las tasas de rendimiento. Este fenómeno se ha visto acompañado por la adopción de posiciones bajistas por parte de inversionistas destacados, según sus declaraciones recientes.Identíficate o Regístrate para leerlo